Un proyectil penetró la planta de sus pies, en este momento difícil, el hermano recordó las promesas de Dios, se fortaleció en el Señor, le dijeron que tendría que estar dos años en recuperación, y en su casa tuvo una experiencia donde Dios lo sanaba. Al otro día en la cita médica de control el se pudo levantar y testifica para Gloría del señor. (Falla de origen de imagen)