El señor le dijo en profecía que su esposo viviría un momento difícil para que él reconociera que Dios es vivo y de poder. Así fue que su hijo cayó en coma y la hermana dice que creen que el hijo en algún momento murió. Dios llenó de fortaleza a la hermana durante la situación. Luego Dios le habló a la hija de esta hermana en Boston y le dijo que había un ser querido que estaba muy cerca a la muerte pero que Dios se iba a glorificar y haría un milagro muy grande. La hermana se sintió muy confortada. Los médicos dijeron que él moriría, que tendrían que hacerle trasplante de hígado y de riñón y que su mente no iba a estar bien. Pero Dios dijo que haría el milagro. Al poco tiempo él empezó a reaccionar, no le hicieron trasplante de hígado ni de riñones porque Dios los restableció, tampoco tiene problemas cerebrales.