Testimonios de hermanos y hermanas de Japón, Costa Rica y República Dominicana – 17 de abril de 2020

Testimonio en Japón:
Dios le dijo en profecía que habría momentos difíciles para su familia, que tendría tiempo para meditar en lo suyo, que firmaría documentos y que Dios le proveería un bien material. En Japón han tenido el virus desde enero. Sucedió que en febrero se dañó su refrigerador, que habían comprado por solo 80.000 yenes junto a varios aparatos electrónicos, de la garantía les dijeron que no era posible arreglar y que les devolverían el dinero que había costado originalmente, pero la hermano no sabía cuanto costo porque lo habían comprado a una familia. Y la empresa les devolvió por el refrigerados 130.000 yenes. Gracias a Dios que dispuso estos ingresos extras, manifestándose en el momento menos esperado, así como había profetizado la Hna. María Luisa durante la enseñanza. La hna que testifica y su esposo que también es japonés están agradecidos por ese milagro que Dios hizo.

Testimonio en Costa Rica:
Testifica que sus nietos comenzaron a tener fiebre y a sentirse muy mal, su familia temía que fuera por causa del virus, así que la hermana comenzó a escuchar con su hija la enseñanza de la Hna María Luisa y a pedirle a Dios durante la oración de La Hermana María Luisa Piraquive, y testifica que Dios hizo un milagro porque pasadas unas pocas horas los niños ya estaban sanos. Gracias a esta experiencia su hija se ha fortalecido en creer y confiar en Dios.

Testimonio en República Dominicana:
El hermano testifica que estaba esperando que en su trabajo le depositaran el dinero correspondiente a su quincena y se encontraba preocupado porque en la gran mayoría de las empresas han suspendido a todos los empleados. Él le oró a Dios y le pidió que tuviera misericordia, que no lo incluyeran en esa suspensión porque con su salario además de cubrir sus gastos, podía ayudar a sus seres queridos. Dios escuchó su oración porque su jefe le notificó que de todos los empleados sólo dejaron a tres (3) dentro de los cuales está el hermano, además estará disfrutando del 100% de su salario y trabajando desde casa. También Dios le tocó el corazón al dueño del apartamento donde vive el hermano para que le pague sólo una parte del alquiler correspondiente al mes marzo y abril, beneficio que también fue extendido a los vecinos del hermano.