Testimonios 18 de Junio de 2020 (Parte 2) – IDMJI

1- Dios sana a un hombre del covid-19, después que él reconoce que Dios existe. Austria

La hermana testifica, que Dios le anunció por medio del don de la profecía, que uno de sus familiares estaría en peligro de muerte. Su hija y su yerno se infectaron del coronavirus. La hija va a la iglesia, y se encontraba en constante oración. Dios la sanó en corto tiempo. El Esposo de su hija manifestaba que Dios no existe y la enfermedad le dio muy fuerte, durante 3 días tuvo mucha dificultad de respirar. Al cuarto día, lo llevaron al hospital pero no lo atendieron por la cantidad de pacientes que había. El yerno de la creyente que testifica, se desesperó ya que ningún medicamento le ayudaba. Su esposa le dijo que le orara a Dios y le pidiera perdón y reconociera que solo Dios lo podría sanar. En ese momento, él reconoció y le clamó a Dios y Dios lo escuchó y al instante lo sanó. Ahora están ambos sanos, él tiene un buen trabajo y han recibido dineros en su cuenta de banco, incluso de personas que no conocen.

2- La hermana recibe el bautismo con el Espíritu Santo y el don de la profecía.  Colombia

La hermana testifica para alabar y glorificar a nuestro Padre Celestial. El Espíritu Santo le hablaba en profecía y le decía  que se esforzará cada día más, porque muy pronto  estaría dando una gran bendición espiritual, la cual ella deseaba y que también la estaría liberando. En estos días de cuarentena, cuando ella ve y escucha  las enseñanzas de nuestro Hermano Carlos Alberto Baena y de nuestra Hermana María Luisa,  ha sentido como Dios la ha libertado, el sábado 13 de junio, estaba en su aposento alabando a Dios, en medio de la alabanza Dios le  dio el bautismo con el Espíritu Santo, también le dio el don de la profecía y usando sus labios le habló. Esto  fue de grande gozo y mucha alegría para ella, vio cumplidas las promesas hechas por el Espíritu Santo por  labios de nuestra Hermana María Luisa.  Dios le ha dado grandes bendiciones espirituales y también materiales, y esto lo testifica para alabar y honrar a nuestro Padre Celestial.

3- Dios obra en la vida de un joven con problemas de sustancias psicoactivas. Colombia

La hermana que testifica, tiene un hijo que a los 14 años cayó en el consumo de sustancias psicoactivas, cuenta que han sido 9 años de grandes dificultades, de grandes luchas, pero Dios la ha consolado y por medio del don de la profecía,  le decía que obraría grandes cambios en ese ser. el joven en los últimos dos años, empezó a presentar problemas psiquiátricos, siempre se veía su rostro como deforme y esto hacía que entrara en muchas depresiones, en muchos episodios de violencia, dañaba los electrodomésticos y los enseres. Antes del confinamiento, en el mes de febrero, Dios permitió hospitalizarlo y a los 5 días que estuvo allí se presentaron muchos inconvenientes, pero nuestro Dios escuchó cada una de las peticiones de la hermana, y a los 5 días ya estaba en un centro de rehabilitación. 

Estando allí le administraban medicamentos, y a los dos meses le quitaron todos los medicinas psiquiátricas y sólo quedó con media tableta para que él pudiera dormir, sin embargo, siempre quiso dejar la institución, pero Dios en su infinita misericordia en la oración que nuestra Hermana María Luisa hizo por las personas que tienen estos problemas, ha ido libertando al joven, pues sabía que su intelecto estaba afectado por el consumo, le costaba trabajo participar con ideas en sus reuniones y no se sentía capaz de seguir adelante con sus estudios, en otra oración nuestra Hermana María Luisa, oró por estas personas que al consumir estas sustancias vienen espíritus malos y los atormentan. El mismo día en la tarde, se comunicó telefónicamente con su hijo y la sorprendió al decirle que ya le gustaba estar allá, que se sentía contento y que iba a poner de su parte para mejorar. LA creyente ve el milagro y la misericordia de nuestro Padre Celestial y el respaldo a su Hija Amada,  por ello y por todas las maravillas que está haciendo en medio de su vida le da la honra, la gloria y la alabanza a nuestro Señor Jesucristo.. 

4- Dios sana a una hermana que padecía de un dolor de hace mas de 20 años. Colombia

Dios por medio del don de la profecía, le había dicho a una hermana que la estaría sanando, que le estaría quitando todos los achaques que tenía. Ella estaba sufriendo de un dolor crónico en la columna a la altura de la zona lumbar, llevaba 20 años con ese dolor y aunque había sido tratada durante todo este tiempo por diferentes médicos, con varios medicamentos y tratamientos fisioterapéuticos, nada había servido para que el dolor por lo menos disminuyera, por el contrario, con el paso de los años este dolor se hacía más intenso y más limitante. Por este motivo, no se podía congregar con frecuencia y se sentía muy triste, cuando podía asistir a la Iglesia, debía ser con un acompañante y pasaba la mayor parte del día en cama, cuando dormía sentía el dolor y al levantarse el dolor era más intenso e insoportable. 

Ella le oraba a Dios con mucha confianza, en cada una de las enseñanzas y meditaciones de nuestra Hermana María Luisa, cuando Dios habló por medio de nuestra Hermana y dio profecía general, la creyente tomó para si esas palabras. A los pocos días, terminando sus labores cotidianas y sostenida de la pared llegó a su habitación y se acostó, habló con nuestro Dios y le dijo: “Señor yo sé que no soy digna de ti y aún así veo tu manifestación en mi vida cada día, gracias por tanta misericordia, gracias por todo lo que tú me das, gracias hasta por este dolor porque sé que es para tu manifestarte en mi vida, acuérdate de las oraciones de tu hija Amada por nosotros, por tu iglesia” y en esos momentos uno de sus hijos la llamó porque la necesitaba, con todo cuidado quedó sentada en la orilla de la cama y sintió algo extraño, pero sólo fue que al quedar de pie que sintió que no necesitó de ningún apoyo y entendió que no sentía el dolor, fue una alegría inmensa, un momento indescriptible, se movía y saltaba y después de casi 20 años ya no sienta ese dolor, se siente liviana, feliz y no para de dar las gracias a nuestro Dios por este milagro. lo testifica para honrar y glorificar al Padre Celestial.   

5- Dios liberta al hijo de una creyente y le da triunfos en su vida académica. Colombia

Este testimonio está basado en un comentario que hizo nuestra Amada Hermana María Luisa, en la enseñanza del 10 de Mayo de 2020, donde la Hermana, hace referencia a cerca de las brujerías y hechicerías y como éstas producen enfermedades físicas, psíquicas, producen trastornos mentales y como la gente se vuelve desquiciada.

Hace más de dos años, Dios le permitió vivir una experiencia de este tipo a una creyente, y por medio de esto la llevó a nuestra Iglesia. La hermana comenta, que su hijo menor en ese entonces, empezaba a cursar el grado décimo o quinto de bachillerato, teniendo él 15 años de edad, pero en esos primeros tres días de estudio, le notaron actitudes extrañas, no normales en él, empezó a hablar incoherencias, tenía momentos de tristeza y llanto, a la vez de agresividad, era más expresivo de lo normal, pues él era más callado y reservado. Empezó a comportarse como un niño pequeño, perdiendo su lucidez mental, ya no leía, ni escribía, ni dibujaba, siendo uno de los mejores estudiantes del colegio, no coordinaba en sus actividades y rutinas normales, a tal punto que lo tenían que bañar, vestir y darle de comer. 

Inicialmente pensaron que era por la ausencia de un familiar que se fue a otra ciudad a iniciar estudios universitarios. Esta familia vivía en Chía Cundinamarca. Cuando detectaron que era algo espiritual, no sabían que hacer, ni a donde ir, se tornó agresivo, con una fuerza que no era normal en él, tuvieron que internarlo en una clínica normal, allá lo sedaron para estabilizarlo y por el comportamiento que presentaba por las convulsiones, tenían que atarlo a la camilla, de manos y pies, algo muy doloroso para sus familiares, sin ningún examen neurológico, el médico lo declaró con esquizofrenia catatónica.

A los dos días, fue trasladado a una clínica psiquiátrica muy reconocida en Bogotá. Los médicos dijeron que por el caso que presentaba, él adolescente debía a quedar recluido de por vida en esa clínica. Dios se glorificó en ese momento, pues la doctora que lo revisó dijo: “Este niño no presenta un caso psiquiátrico y no hay exámenes neurológicos que soporten”, por tanto lo trasladaron a una clínica, para que le realizarán todo tipo de exámenes. En el tiempo que el adolescente estuvo hospitalizado, pudo ver en él todo tipo de enfermedades y los médicos, a la vez quedaban confundidos, pues al realizarle los exámenes, todo salía normal, sin embargo, por lo que veían en él, lo seguían declarando como esquizofrénico, solo un enfermero que no lo asistía, pero que había trabajado con pacientes con este tipo de trastornos, le comentó, que su hijo no era esquizofrénico. Durante mes y medio pasaron por momentos difíciles, el  adolescente tuvo dos recaídas muy fuertes, con espíritus de muerte y de suicidio, también presentó un paro cardiorespiratorio, donde casi muere.

Al otro día, su esposo la reemplazó en la clínica, para que ella pudiera descansar y cambiarse de ropa, cuando al otro día se dirigía nuevamente a la clínica, tomó un taxi en la ciudad de Bogotá, junto con su madre, en el trayecto, le comentaba lo que su hijo había presentado, pero sin tocar el tema espiritual, quien conducía era una hermana de la Iglesia y la invitó para que fuera y escuchara profecía, la taxista le habló de la Iglesia y le dijo donde quedaba el templo en Chía Cundinamarca. La madre del adolescente veía imposible que pudieran llegar a la Iglesia ese día, pues los médicos estaban obstinados en que su hijo salía de esa clínica y quedaría recluido en una clínica psiquiátrica, pero Dios, en el último momento se glorificó, solo un médico psiquiatra, le dijo que si lograba un cupo en la clínica psiquiátrica, donde ella se pudiera quedar con él, por ser menor de edad, el médico daba la salida a esa clínica. Le asignaron una cama en una clínica, al llegar, Dios nuevamente se glorificó, pues esta clínica estaba con muchos pacientes por atender y se acercó un auxiliar de enfermería y al ver que el hijo de la hermana estaba estable, les mandó medicamentos ambulatorios, ansiolíticos y para dormir y los mando a casa. 

Gracias a Dios, ese mismo día, a las 6:00 de la tarde pudieron llegar a la Iglesia, y en la profecía dada por El Espíritu Santo a su hijo Dios le dijo: “Y no te preocupes, pues tu no vas a quedar así, te estaré libertando, asiste a mis Estudios Bíblicos, pues a través de estos te libertare y terminarás tus estudios y te pondré por lo alto en tus estudios”.  A los 3 meses de asistir a la Iglesia, Dios lo libertó, le ha cumplido la promesa en sus estudios, se trasladaron hace año y medio a la ciudad Medellín y el año pasado, cursó completamente su año escolar, ocupando en los cuatro periodos el primer puesto y este año, ya está en su último año escolar. Y para la Gloria de Dios, el informe académico reporta excelentes notas. Todo esto lo ha testificado, para engrandecer el nombre de nuestro Padre Celestial. ¡Gloria y alabanza a nuestro Dios Todopoderoso!