Testimonios 10 de noviembre de 2020 – Iglesia de Dios Ministerial de Jesucristo Internacional
10 noviembre, 2020Testimonios 12 de noviembre de 2020 – Iglesia de Dios Ministerial de Jesucristo Internacional
12 noviembre, 2020Testimonios 10 de noviembre de 2020 – Iglesia de Dios Ministerial de Jesucristo Internacional
10 noviembre, 2020Testimonios 12 de noviembre de 2020 – Iglesia de Dios Ministerial de Jesucristo Internacional
12 noviembre, 2020Testimonios 11 de noviembre de 2020 – Iglesia de Dios Ministerial de Jesucristo Internacional
1- Testimonio de sanidad de tumor
Pasto, Nariño, Colombia
Testifico para gloria de Dios que en diciembre me detectaron un tumor en la garganta, en la vena aorta, me dieron la cita para marzo, pero a raíz de la pandemia no pude hacer nada, tenía la promesa de mi Dios de que me iba a sanar y así fue que hace 15 días fui al especialista y me hizo un examen, entonces me dijo el doctor te tengo dos noticias una buena y una mala, cuál quieres que te dé primero.
Dios se glorificó porque tenía una leve inflamación y la buena noticia era que el tumor ya no estaba. Le doy la gloria y la alabanza a mi Padre Celestial
2- Testimonio de un Hno que se congrega en la Iglesia de Holanda.
El hermano testifica como Dios ha bendecido su vida, desde la primera vez que le habló en profecía, y ahora como le ha dado un cambio de vida, llevándolo a otro país, dándole una familia y ahora en época de pandemia como ha podido dedicarse más a lo de Dios.
3- Dios sana a sus familiares y le ayuda para poder pagar una deuda que tenía
Cali, Colombia
Transcripción:
Quiero testificar para la honra y gloria de mi Padre celestial; que en profecías pasadas me había dicho: “Hijo mío, un ser sangre de tu sangre de avanzada edad, estará delicado de salud, solo órame, clámame que yo me manifestaré” Así fue como mi tío de 81 años y su esposa, salieron infectados con el covid-19 y para la honra y la gloria de mi Padre celestial, hoy ya se encuentran fuera de peligro, no hubo necesidad de llevarlos a un hospital, todo el tratamiento se llevó a cabo en la casa y hoy se encuentran bien de salud.
También mi Dios me decía: “Hijo mío no preocupes te ayudaré a pagar tus deudas” y a través de un sueño Dios me mostraba que faltando 2 días para cumplirse el plazo, y yo le clamaba en el sueño a Dios. Fue así como Dios se manifestó y sucedió como en el sueño; faltando 2 días para cumplirse el plazo, me dio los dineros y pude saldar la deuda. Todo esto lo testifico, para la honra y la gloria de mi Padre Celestial.
4- Testimonio de bendición laboral
Pasto, Nariño, Colombia
Quiero compartir algo maravilloso qué ha obrado Dios. En este tiempo de la pandemia Dios no me ha faltado nada ni a mí ni a los míos. Puedo decir qué en esta pandemia he tenido mucha abundancia, Gloria a Dios. Salí a trabajar a otro departamento Dios me ha protegido, me ha cuidado, ha puesto muchos ayudadores, estando acá es Como si la pandemia no existiera, es Todo normal.
Hermanos estando acá se llegó la fecha en la cual debo renovar una licencia para seguir trabajando, Dios me suplió, ore Dios agradeciéndole por qué ya pague el curso, pero debo transportarme a otra ciudad para presentar dichas pruebas, yo le decía “Señor yo no te pido lo qué no necesito, tú conoces mis necesidades Como lo dice tu Santa escritura”
Le dije qué estamos solo los dos, qué no tengo a nadie en este departamento qué humanamente estoy sin familia, le dije Dios tú eres el único qué me ha acompañado siempre, es así hermanos Como Dios obró un milagro ayer jueves en noche le oré a Dios y Hoy viernes Al despertar ya encontré un depósito en mi cuenta bancaria.
También me prometió un aumento salarial y es así hermanos como también recibí la Grata noticia de que será valorado y remunerado un poco más mi trabajo, Todo gracias a nuestro Dios Vivo y de poder. Dios ha cumplido sus promesas que nos ha hecho por labios de nuestra Hermana Maria Luisa, qué nos estaría escuchando nuestras oraciones, que confiemos en Él.
¡Gloria y honra a mi Padre Celestial!
5- Dios acompaña en momento difícil en la salud y hace una obra en sus vidas
Cali, Colombia
Transcripción
Quiero testificar para glorificar a mi Dios. Hace unos años, en profecías pasadas, Dios me decía que venían momentos muy difíciles para mi hogar, pero que no me fuera a preocupar, que Él nos iba a sacar adelante, que fuera muy fuerte, porque yo vería como Él estaría dándole solución a todo, y de esa manera iba a unir más mi hogar.
En diciembre del 2018, mi esposo quien siempre ha sido una persona con mucha salud, sufrió un episodio donde perdió el conocimiento por 4 horas, tuvimos que llevarlo de urgencias a la clínica, y los médicos hacían una y otra cosa para que él recobrara su conciencia, incluso intentaron pincharlo con agujas en el brazo y él no mostraba ninguna reacción al respecto, fue entonces cuando decidieron hacerle un examen muy profundo en el cerebro y después de 4 horas fue reaccionando, sin acordarse de nada de lo que había sucedido. Ese día lo dejaron en observación, le hicieron muchos exámenes y todos salieron bien, al no presentar ninguna anomalía, decidieron darle de alta al siguiente día. En la mañana siguiente empezó con reacciones extrañas, en momentos no reconocía a nadie, hablaba incoherencias y presentaba muchos otros síntomas, por tal razón fue remitido al neurólogo, quien después de muchos exámenes médicos, le diagnostico que él tenía unas crisis elásticas, las cuales son un tipo de epilepsia.
Posteriormente le dieron salida de la clínica con muchos medicamentos y estuvo incapacitado 2 meses más o menos. Para abril de 2019 regreso a trabajar, unos días se encontraba bien, otros no tanto, pero Dios me decía en profecía que fuera muy fuerte, que Él estaría sanándolo y que vería cuan grandes cambios haría en nuestras vidas. Yo seguía orándole y los dos muy entregados a Él. Al final del 2019, mi esposo empezó a empeorar, le daban muchísimos mareos, dolores de cabeza muy fuertes y se le olvidaban las cosas. En momentos me sentaba hablar con él de algún tema y al rato ya me estaba preguntando lo mismo olvidando que ya lo habíamos hablado. Inclusive en cierto momento después de salir de la Iglesia, llegando a nuestro hogar, se desesperaba porque no sabía dónde estaba, yo lo abrazaba y tranquilizaba.
En enero del 2020, fue remitido por el neurólogo al neuro-psicólogo, quien le practico unas
pruebas de evaluación cognitiva superiores y el resultado fue que presentaba un deterioro
cognitivo muy severo. En ese momento lo volvieron a incapacitar, fue hospitalizado por 9 días, donde le aplicaron un tratamiento con esteroides. Después de los 9 días cuando le iban a dar de alta, el doctor nos dijo que debíamos ser muy conscientes que la vida de mi esposo no iba a volver hacer la misma, pues que el cerebro había sufrido unos problemas muy severos, por lo tanto él tenía que irse adaptando a la nueva vida que iba a presentar, que poco a poco iba a irse recuperando, pero que no iba a volver hacer la misma persona de antes. En ese momento lo incapacitaron y nos mandaron para la casa. Por esos días comenzó el confinamiento por la pandemia, cuando ya no pudimos volver a la Iglesia, empezamos a dedicarnos aún más a Dios y a sacar más tiempo para Él.
Dios nos ha unido muchísimo, ha sido de mucha bendición todo esto que le ha acontecido a mi esposo, porque aun con nuestros hijos, hemos visto el cambio y la unidad que ha dado Dios a nuestro hogar, estoy muy feliz y le doy muchas gracias a Dios por todo esto que nos ha permitido vivir, porque aunque han sido momentos muy difíciles, han servido para ver su poder y sus milagros; ya que mi esposo de un momento a otro ha empezado a mejorar, a recobrar su memoria y sus capacidades neurológicas.
Hace un mes el neuro-psicólogo lo volvió a ver y le practico las pruebas y contento nos exclamó lo impresionante de la mejoría que ha presentado, pues el examen arrojo un déficit cognitivo leve, y esto fue de gran felicidad para nosotros, pues veo como mi esposo se ha recuperado, ya es el hombre alegre que era antes y estamos muy contentos porque en este tiempo hemos visto la mano de Dios cuidándonos y ayudándonos con muchos compromisos que teníamos, donde no nos ha faltado con nada, e incluso hemos podido disfrutar de una bendición que Dios nos dio por parte de una ayuda del gobierno, la cual fue para nosotros de gran sorpresa y alegría.
Todo esto Hermanos lo quiero testificar para glorificar y honrar a Dios y darle muchas gracias por todas aquellas bendiciones y misericordias que ha tenido con nosotros.
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