Testimonios 7 de marzo de 2022 – Iglesia de Dios Ministerial de Jesucristo Internacional.
7 marzo, 2022Testimonios 17 de marzo de 2022 – Iglesia de Dios Ministerial de Jesucristo Internacional
17 marzo, 2022Testimonios 7 de marzo de 2022 – Iglesia de Dios Ministerial de Jesucristo Internacional.
7 marzo, 2022Testimonios 17 de marzo de 2022 – Iglesia de Dios Ministerial de Jesucristo Internacional
17 marzo, 2022Testimonios 10 de marzo de 2022 – México – Iglesia de Dios Ministerial de Jesucristo Internacional
Primer testimonio:
El hermano testifica para engrandecer el nombre de Dios, que tiene menos de 3 meses de estar en la Iglesia y que no creía en Dios, Él era ateo y no creía en nada, nunca había creído y a la edad que tiene la cual es de 60 años Él no creía en Dios, y la primera vez que fue a la Iglesia recibió profecía y la primera palabra que Dios le dijo fue “Yo sé que tú no crees en mí, pero de hoy en adelante lo vas a hacer” le habló de todo lo que había pasado, de la familia del hermano, Él tenía muchos dolores y estaba enfermo en ese momento y Dios le dijo que esos dolores que estaba sintiendo en ese momento, Él se los iba a quitar, el hermano acababa de hacerse unos análisis clínicos y Dios le habló de ello y le dijo que esos estudios clínicos iban a salir negativos y así fue, el hermano testifica que Dios le está guiando y le gusta al hermano lo que está viviendo con Dios, el hermano comparte que quiere a Dios y que Dios le dijo que testificara y agradece a Dios por todo lo que está viviendo.
Segundo testimonio:
El hermano envía un cordial saludo desde la Iglesia de Cancún, México. El hermano comparte su testimonio para la Honra y Gloria del Señor. Dios en pasadas profecías le decía al hermano que apartará lo de Dios, lo que le pertenecía y que de esa manera el Señor le estaría multiplicando al hermano y nada le faltaría en la mesa, el hermano comparte que una vez que Él y su esposa llegaron a la Iglesia Dios les ha enseñado a diezmar de la manera correcta y que a través de las enseñanzas de nuestra muy Amada Hermana María Luisa Dios ha puesto un sentir en el corazón de ellos de diezmar de manera desinteresada sin pensar si va a hacer falta algo, poniendo en primer lugar las cosas del Señor; una vez que los hermanos comenzaron a hacer esto, en su casa no les ha faltado alimento en su mesa, han tenido trabajo, Dios les ha permitido pagar deudas, han tenido la oportunidad de tener su propia vivienda, un medio de transporte que tanto anhelaban y comparte que Dios es tan misericordioso que cumple cabalmente todas las promesas que les ha hecho, esto lo testifica el hermano para la Gloria y Honra del Señor.
Tercer testimonio:
La hermana testifica desde la Iglesia de Veracruz, México que ella diezmaba, pero que había días en los cuales ella no diezmaba en su totalidad y la hermana se acordaba acerca de la enseñanza y del ejemplo que el Predicador ponía acerca de que cuando faltaba 1 gramo significaba que no era 1 kilogramo entero y esta enseñanza le impactaba mucho a la hermana, un día en una enseñanza que dio la Hermana María Luisa acerca de los diezmos, la hermana le pedía mucho a Dios que le diera la fuerza de voluntad, o qué le enseñará, ya que ella no podía con sus gastos, pues en el corazón de la hermana tenía el anhelo de diezmar de toda la totalidad que entraba en su hogar, cuando la hermana comenzó a escuchar los testimonios acerca de los diezmos ella oraba mucho a Dios para que el Señor le enseñara y le pusiera en el corazón, fue así que en una semana sorprendentemente la hermana tenía más dinero que lo que normalmente tiene en la semana y ella sin pensarlo tomó y apartó lo que es de Dios y solamente dijo: Señor si yo no lo apartó yo quedo mal contigo. Fue así que consecutivamente comenzó a apartar los diezmos y las sorpresas para la hermana han sido grandes porque el Señor le ha permitido hacer gastos grandes, obtener cosas que ella ha querido, salir a otros lugares y cuando la hermana va a ver su cuenta ya está adelantada la semana de sus gastos y para la hermana esto ha sido maravilloso y sorprendente y la hermana lo testifica para Gloria del Señor.
Cuarto testimonio:
El hermano testifica para darle la Honra y la Gloria al Señor, Dios en su Santa Profecía le dijo que sería Él quien estaría firmando unos documentos por el hermano, y que sería Dios quien los estaría firmando directamente y que no se preocupara en ese momento de dificultad y de adversidad. Es así como el hermano no sabía que le había llegado un citatorio para hacer unas aclaraciones de unas declaraciones de impuestos y ya se había vencido completamente el tiempo, el plazo para responder y eso podría acarrear a la familia del hermano y a Él un problema económico en contra del presupuesto que ellos ya tienen; cuando el hermano fue directamente a las oficinas del fisco para resolver la situación, ya que el hermano no había visto esos citatorios, cuando el hermano se presenta la persona que le atendió le dice que ya habían sido respondidos, le mostraron la pantalla y le hicieron la impresión y le dijeron que había 3 citatorios, 3 requerimientos y fueron enviados y fueron firmados y el hermano comprendió que había sido el Señor y el hermano lo testifica para el Honor y la Gloria del Señor.
Quinto testimonio:
La hermana envía un cordial saludo desde la ciudad de Cancún, Quintana Roo, México, testifica para la Gloria y Honra del Señor, que cuando ella llegó a la Iglesia llegó desahuciada por la medicina, le diagnosticaron insuficiencia renal crónica en donde había perdido más del 60% de sus riñones fue así que cuando la hermana recibió su primera profecía el Señor en su infinita misericordia le consoló diciéndole que no se preocupara por la enfermedad que tenía y que sería Dios alargándole los días de su vida es así como ya han transcurrido 7 años en donde la ciencia médica se pregunta que toma, que receta sigue o que consume en comidas porque ellos se sorprenden de que la enfermedad de la hermana se haya detenido, la hermana testifica que no ha sido fácil y que durante los 2 primeros años ella se congregó como oyente y el Señor le enamoró con su doctrina, los siguientes 2 años despertó y decidió buscar lo espiritual y fue así como el enemigo le puso muchos ataques al cuerpo de la hermana, estuvo yendo a la Iglesia por 2 años con una presión arterial muy elevada e hinchazón en el cuerpo en donde el calzado y la ropa le ajustaba, al asistir a las alabanzas recibía imposición de manos y salía muy contenta y gozosa y sin sentir ninguna enfermedad, ningún síntoma, posteriormente la hermana tuvo una gran bendición con la visita de Nuestra Amada Hermana María Luisa donde le impuso manos y Dios le regaló unas palabras a través de los labios de la Hermana María Luisa; el Señor le decía a la hermana que no se iba de la Iglesia sin nada que no estuviera triste, que se iba de la Iglesia con una gran bendición, esa misma noche la hermana se enfermó muy fuerte de fiebre muy alta, la hermana estaba sola en su hogar aun así la hermana reía y le decía al Señor: Te conozco y entiendo este gozo que siento es esa felicidad de saber que tú me tienes de la mano. Ese fue el último día en el cual la hermana estuvo postrada en una cama por esa enfermedad, desde ese entonces, marzo del 2018 cuando la Hermana María Luisa le impuso manos no ha vuelto a tener hinchazón en el cuerpo, está normalizada con la presión arterial siguiendo las indicaciones médicas, pero la hermana testifica que se siente muy bien, se siente feliz, se siente con salud, ha podido realizar todas sus actividades y le regaló una vitalidad increíble porque esa fue la promesa que Dios le hizo y todo esto lo testifica para engrandecer el Nombre de Nuestro Padre Celestial.
Sexto testimonio:
La hermana envía un saludo desde la Iglesia de Acajete, Puebla y la hermana testifica acerca de las grandezas que Dios ha hecho en medio de su vida, hace 10 años que la hermana llegó a la Iglesia llegó con su familia completa muy atribulados, llenos de esperanza buscando esa paz que no encontraban y la hermana testifica que ella llegó con su pequeña en silla de ruedas, la hija de la hermana llegó muy enferma y con muchas ansiedades, gritaba mucho y se sentía inquieta porque la hija de la hermana es invidente y todo le angustiaba, desde que llegaron a la Iglesia comenzó a ser transformada, a cambiar, pocos años después comenzó a tener convulsiones y Dios le prometía a la hermana que le estaría sanando y que la estaría perfeccionando y Dios hizo la obra porque hoy en día ya no sufre de esas convulsiones, puede dormir y está sin medicamento, esta muy sana y muy tranquila y cada día Dios le da mucha conciencia de lo que ella hace y de lo que vive y esto le ha dado mucha paz a la hermana y mucha tranquilidad en su vida y esto lo testifica para darle la Gloria a Nuestro Padre Celestial.