Testimonios 1 de Junio de 2021 – Iglesia de Dios Ministerial de Jesucristo Internacional

Testimonio de sanidad
Sogamoso, Boyaca, Colombia

Transcripción:
Quiero testificar para darle la honra y la gloria a Dios. Hace un tiempo en profecía me había dicho que acudiera a la ciencia y que a pesar de que el diagnóstico fuera poco alentador, él se iba a glorificar en el último momento; es así como en el mes de noviembre me tomaron una ecografía de abdomen total, donde mostró que había una leve dilatación biliar. Posterior a esto, el especialista ordenó un examen especializado donde en tan solo un mes la dilatación ya había aumentado considerablemente. El médico considera necesario que debo ingresar por urgencias para tomar más exámenes y hacer una cirugía. Toman un TAC y este muestra que la dilatación seguía aumentando.

El especialista procede a hacer la cirugía para mirar qué estaba obstruyendo el conducto biliar; según los exámenes todo apuntaba a una lesión o tumor maligno.

Según el médico, la cirugía se iba complicando porque para la cirugía él necesitó un líquido de contraste, el líquido debía eliminarse solito, pero no fue así, así que él tuvo la necesidad de colocar un stent, de lo contrario se hubiera presentado una colangitis, que es una infección severa que puede llegar a ser mortal. Estuve una semana hospitalizada, hice una pancreatitis, cuando lograron controlar la pancreatitis me iban a dar la salida, el médico se dio cuenta de que estaba deshidratada y debía quedarme un día más.

Bajé 6 kilos en esa semana, mi familia estaba muy angustiada, yo confiaba en la promesa de Dios. Más sin embargo, yo me arrodillaba y le oraba que no permitiera que tuviera nada malo, le recordaba su profecía. Posterior a la cirugía el médico ordena nuevamente exámenes y a pesar de tener un stent que este ayuda a disminuir la dilatación biliar, la dilatación continúa y ya se había comenzado a dilatar el conducto pancreático. El médico me dice que por las características de la dilatación hay un tumor maligno, pero que no lo encuentra donde está, me advierte de una segunda cirugía y decide remitirme al hepatobiliar. Este segundo especialista dice que no necesariamente puede haber un tumor maligno en el conducto biliar, pero que sí seguramente es una condición con la cual debo aprender a vivir. Ordena una ecografía endoscópica con biopsia. Según él, es el examen más avanzado que existe en este momento.

Dios, en su inmensa misericordia, me había dado dos sueños sobre mi situación de salud, en uno de ellos me veía en la clínica en una camilla y el enfermero que siempre acompañó al médico en mis procedimientos me decía: descartada patología para malignidad, ahí entendí que efectivamente Dios se iba a glorificar en mi salud. Llega el momento de la segunda cirugía, el médico me advierte de los riesgos de esta cirugía, ya que necesita entrar al conducto biliar con un balón de dilatación, por lo cual hay riesgo de perforación y sangrado. Yo le contesté: tranquilo doctor, que Dios está con nosotros y Dios le va a dar sabiduría; así fue, la cirugía fue un éxito y en esta ocasión solamente estuve hospitalizada un día, los resultados de patología arrojaron que no había tumor, pero que aún había dilatación.

Finalmente, el 18 de mayo me realizaron la ecografía endoscópica, el examen salió perfecto, la dilatación desapareció y el médico dijo que no había necesitado tomar biopsias porque no encontró a qué, me dijo: no sé qué pasó, y yo le contesté: yo sí sé lo que pasó doctor, Dios se glorificó en mi salud. La honra y la gloria para ese Dios de poder.

Dios obra sanidad luego de 7 años de enfermedad, Dios también permite que su pipeta de gas dure mucho tiempo sin gastarse en su hogar
Sogamoso, Boyaca, Colombia

Transcripción:
Hermanos, testifico para honrar y glorificar a nuestro Dios, que en profecía el Espíritu Santo me decía que sanaría uno a uno mis órganos. Les cuento, hermanos, que por más de siete años una bacteria permaneció en mi cuerpo, causando grandes molestias y dolor, los medicamentos no obraban, los exámenes cada día eran más complicados, me disminuía el dolor tomando grandes cantidades de agua y no podía permanecer mucho de pie.

Los médicos me decían que al futuro las cosas se complicarían, me acordé que Dios me había dicho que visitara la ciencia médica y apenas abrieron carreteras en agosto por la pandemia viajé a Bogotá en busca de ayuda, pero con mucha fe escuchaba atenta a las enseñanzas, le oraba y le pedía a Dios con detalle lo que me estaba pasando; y un día, en una oración con la Hermana María Luisa, sentí que era mi bendición y así fue hermanos a los pocos días me tomé un examen y el resultado fue perfecto como en 7 años no me había salido, me arrodillé glorifique a Dios con lágrimas y hoy me siento sana.

Pero las bendiciones no terminan ahí me ha venido sorprendiendo grandemente suministrándome el gas, el apartamento donde vivo no tiene gas domiciliario, inició la pandemia y sentí temor de salir a comprarlo, fueron pasando los días y los meses y el gas continuaba ya habían pasado 4 meses y cuando abrieron las carreteras viajé y regresé en diciembre, empecé a pedirle el gas a Dios cada día con mucha fe y hermanos, en febrero y aún sigo cocinando con la misma pipeta para tres personas, sumándolos, llevo seis meses y medio en total, con el mismo cilindro. Mi vecina se sorprende y he testificado para darle la gloria y la honra a mi Padre Celestial.

Dios guarda la vida de la madre de una creyente que contrajo covid-19
Orquídeas, Bogotá, Colombia

Testifica que sus familiares en Medellín contrajeron Covid-19 y ante eso oraron y alabaron a Dios, su mamá desmejoró y la llevaron a urgencias donde no encontraron lugar para ella, y en otro hospital tampoco pudieron tenerla en urgencias, pero le habilitaron un lugar en una parte de la clínica, pero les advirtieron que si no encontraban una UCI tenía un gran riesgo de fallecer porque el virus le había generado una fuerte infección en sus pulmones y en la ciudad solo quedaban 2 UCI´s. La hermana le oró a Dios y le expuso lo que sentía en su corazón y que se hiciera la voluntad de Dios con su mamá. Ella estuvo varios días intubada, fue evolucionando y Dios le dio experiencias espirituales, Dios cumplió su promesa y ahora su mamá está en casa y están cuidando de ella, Dios mostró su poder, porque al salir del hospital tenía que movilizarse con gran dificultad y ahora solo sosteniéndose de las manos de alguien puede moverse, gloria a Dios.

Dios cuida y sana del covid a creyente con enfermedades de base
Palmira Libertadores, Valle, Colombia

Transcripción:
Testifico para dar la gloria y la honra a mi Padre Celestial, que en el año pasado en tiempos de pandemia, Dios se ha glorificado se ha manifestado, el alimento no me ha faltado, también quiero testificar de que como soy un paciente con enfermedades como artritis, fibromialgia y osteoporosis que son tratadas con medicamentos muy fuertes y me baja mucho las defensas, en abril me he contagiado del Covid-19. Para gloria y honra de mi padre celestial, ese proceso tan duro lo pasé aquí en mi casa con muchos malestares pero también siempre orando, confiando en las promesas de nuestro Dios que me decía que siempre iba a estar llevándome dé su mano. Cuando ya me llegó la prueba positiva los médicos aterrados me dijeron que ya lo peor había pasado y que yo tenía la mejor medicina del mundo que era nuestro Dios, porque yo le dije que era un milagro de nuestro Dios que la gloria se la daba a Él, mi hija también estuvo muy enferma, pero lo de ella fue una gripe simplemente. A mi familia les decía que no se preocuparan que Dios estaba conmigo, en esos días sentí la presencia de Dios más que nunca siempre confiada en sus promesas vi su promesa cumplida en todo, que Él siempre me llevaría de su mano, testifico para dar la gloria y la hora a mi Padre Celestial.