Primer testimonio (Santander de Quilichao, Cauca): Dios le prometió a un hermano que le guardaría, fue así que conduciendo una motocicleta impactó de frente contra un bus, pero Dios se manifestó al punto tal que el hermano expresa que sintió en ese momento que era como una almohada lo que impactaba con él.
Segundo testimonio (Kennedy, Bogotá): El señor le prometió a la hermana que la sanaría de enfermedades, en las alabanzas le daba mucho dolor de espalda y sueño en las alabanzas, también estaba muy enferma de sus órganos internos y en una alabanza tuvo una visión en la que le realizaban una cirugía, el Señor la ha libertado y ha cambiado su forma de ser y le da la gloria al Señor.